La isla de Monterrico-Hawai cuenta con varios Tortugarios, criaderos de iguanas y cocodrilos, un gran número de senderos acuáticos que caracteriza el Canal de Chiquimulilla, así como las Salinas de Agua Dulce. Esta isla ha sido privilegiada por la visita de miles de tortugas marinas, sin embargo hoy las dos únicas especies, que regresan a estas playas son: Tortuga Baùle (leatherback) y la Tortuga Parlama (olive ridley), las cuales están en peligro de extinción, pues de las pocas que tienen la oportunidad de arribar a la playa a desovar sus huevos son robados y comercializados en el mercado. Para erradicar esto, se necesita mucho esfuerzo, pues de cada 1,000 tortugillas que llegan al mar tan solo 1 regresa como tortuga adulta, y una tortuga adulta aproximadamente pone 120 huevos en un año, de los cuales el 80% es comercializado.