Algunas veces nos podemos encontrar ante una situación que puede o no comprometer la vida de nuestro animal, pero ahí se puede presentar nuestra primera duda: ¿Es realmente urgente lo que le ocurre? , debería llamar al veterinario? Lo más importante es saber valorar la situación y no intentar a jugar de doctor con nuestra mascota. Muchas urgencias son evidentes (atropellos, quemaduras, intoxicaciones, etc..) pero en otras ocasiones no lo son tanto. Ante todo esto no debemos olvidar la figura del veterinario que será el que finalmente atenderá a nuestra mascota para asegurar que todo se he llevado a cabo de forma correcta y establecerá el tratamiento más eficaz para cada caso.