Desde pequeños, nos enseñan que debemos comer tres veces al día con porciones saludables, siguiendo una proporción equilibrada: 50% de vegetales, un porcentaje de proteínas y, finalmente, carbohidratos. Aunque esta regla general es fácil de entender, ¿la aplicaríamos de igual manera para un niño que es más activo que un adulto promedio, o para una persona mayor que necesita más calorías para mantener su ritmo diario? Lo mismo ocurre con quienes tienen diferentes necesidades nutricionales, como personas con sobrepeso o con peso bajo. Las reglas generales no siempre funcionan para todos.
De igual manera sucede con nuestros amigos de cuatro patas. Existen perros grandes y pequeños, con estilos de vida distintos, algunos con sobrepeso y otros con bajo peso. Todos requieren una dieta adaptada a sus necesidades específicas, pero es posible empezar con una regla básica antes de personalizar su alimentación.
La Regla Básica para Porcionar el Alimento
Si tu perro es de raza mediana o grande, una guía sencilla es: por cada 10 libras de peso, tu perro debe consumir 1 torta de alimento húmedo. Si tu perro es de raza pequeña, por cada 10 libras debe recibir 1 taza de bites de alimento.
Por supuesto, esta es solo una regla inicial y general, pero es un buen punto de partida para quienes buscan saber cuánto alimento darle a su perro.

Evaluando el Peso de tu Mascota
Una vez que sigas esta regla básica, es importante evaluar el peso de tu perro. Pregúntate: ¿Está mi perro en el peso adecuado para su raza, edad y tamaño? ¿Está bajo o pasado de peso? Si no mantienes un control regular, aquí tienes una forma sencilla de evaluar su estado físico:
- Perro con peso bajo: Si al observar a tu perro desde arriba notas una cintura muy marcada y puedes sentir sus costillas fácilmente al tocarlo, es probable que esté bajo de peso.
- Perro con sobrepeso: Si su cintura parece más ancha que su espalda y al palparlo sientes mucha grasa alrededor de esta zona, entonces está por encima de su peso ideal.
- Perro con peso ideal: Si su cintura se distingue ligeramente desde arriba, sin ser demasiado pronunciada, y al tocarlo no sientes ni demasiada grasa ni sus costillas prominentes, probablemente esté en un peso saludable.

Otros Factores a Considerar
El estilo de vida de tu perro también influye en sus necesidades alimenticias. Aquí algunos aspectos a tener en cuenta:
- ¿Tu perro es activo o sedentario?
- ¿Cuántas veces lo sacas a pasear al día?
- ¿Le das snacks de tu comida o solo su alimento habitual?
- ¿Está castrado o esterilizado?
Todos estos factores afectan la cantidad de comida que debe consumir tu mascota. Ajustar la porción según estas variables es clave para mantener a tu perro sano y en forma, sin olvidar que un buen seguimiento con su médico veterinario es esencial para obtener toda la información que contribuye a que tu peludito esté en óptimas condiciones.
