Los perros terapistas, sin duda, son ángeles que vienen a este mundo para dar esperanza y amor a todas esas personas enfermas que se encuentran convalecientes en las frías habitaciones de los hospitales.
En toda la literatura relacionada con la terapia asistida con animales, hay testimonios de los efectos positivos sobre el estado de ánimo tanto de usuarios como del personal de las diferentes instituciones hospitalarias.
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En Portugal se han realizado estudios rigurosos en que consta una mejoría notable sobre el estado de ánimo en ancianos en una residencia, en personas recluidas en hospitales con largos tratamientos, con niños con problemas de aprendizaje.
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Además los perros de terapia ayudan a superar la depresión y las visitas a instituciones sirven para combatir la monotonía diaria presente en los cuartos de hospital.
Los perros sirven como motivación para las distintas modalidades de tratamiento. Un niño con parálisis cerebral que debe realizar ejercicios físicos de rehabilitación, los hace encantado cuando participa un perro.
Cuando hay visitas asistidas con perros a los hospitales, todos los enfermos recluidos esperan con ansias la llegada de los doctores caninos, es una ilusión tan grande que es toda una fiesta cuando los amigos peludos llegan a visitarlos.
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Fuente: terapiaconperros.com