Educar a nuestro perro es importante porque les ayuda a comprender qué comportamientos son aceptables y crea un vínculo fuerte entre usted y su amigo peludo. El entrenamiento mejora la comunicación, garantiza una mascota feliz de buen comportamiento y promueve una convivencia armoniosa entre su perro y la familia.
Hoy te dejamos los 10 errores más comunes al educar a tu perro, esperando te faciliten está etapa con tu amigo peludo.
- Inconsistencia: es uno de los errores más comunes en las reglas y comandos. Los perros prosperan con la rutina y las expectativas claras. Si permites un comportamiento a veces y lo corriges otras veces, puedes confundir a tu perro.
2. Falta de paciencia: el entrenamiento lleva tiempo y es posible que los perros no aprendan de inmediato. La impaciencia puede generar frustración y el castigo puede no ser efectivo. El refuerzo positivo por buena conducta generalmente tiene más éxito.
3. Ignorar las necesidades básicas: asegúrese de que su perro esté estimulado física y mentalmente. La falta de ejercicio y compromiso mental puede provocar problemas de conducta. Un perro cansado suele ser un perro que se porta bien.
4. Pasar por alto la socialización: la socialización temprana y continua es crucial para un perro bien adaptado. Exponer a su perro a diferentes personas, animales y entornos ayuda a prevenir problemas de miedo y agresión.
5. Usar el castigo en exceso: depender demasiado del castigo puede generar miedo y ansiedad en su perro. El refuerzo positivo (recompensar el buen comportamiento) generalmente es más eficaz y crea un vínculo más fuerte.
6. No comprender el lenguaje corporal canino: Los perros se comunican principalmente a través del lenguaje corporal. Malinterpretar sus señales puede provocar malentendidos y posibles conflictos. Aprenda a leer las señales de su perro para comprender sus sentimientos.
7. Saltarse el entrenamiento de obediencia básica: las órdenes fundamentales como sentarse, quedarse quieto y venir son esenciales. Saltarse estos conceptos básicos puede provocar una falta de control sobre sus perros en diversas situaciones.
8. Dar recompensas inapropiadas: use golosinas que sean apropiadas para el tamaño y la salud de su perro. La sobrealimentación puede provocar problemas de peso y las golosinas poco saludables pueden provocar problemas digestivos.
9. Descuidad los controles veterinarios regulares: los cambios de comportamiento a veces pueden estar relacionados con problemas de salud. Los controles veterinarios periódicos garantizan que su perro se encuentre bien físicamente, lo que contribuye a su buen comportamiento.
10. Pasar por alto el refuerzo positivo: reforzar el buen comportamiento con elogios y recompensas. Esto ayuda a su perro a comprender lo que quiere y lo que anima a repetir el comportamiento deseado.
Recuerde, cada perro es único y lo que funciona para uno puede no funcionar para otro. Adapte su enfoque de entrenamiento a las necesidades individuales de su perro y se paciente y constante durante todo el proceso.
Por: Mónica Medina Veterinarian affair specialist Hill´s Guatemala / Suplimet