El amor por las mascotas, motivaron el rescate de une perrito llamado Lobo en el 2012 por Pablo Pereira y Juanita Esparza, fue encontrado en pésimas condiciones, sin esperanzas de sobrevivir. Pero no sabían la fuerza que tenia lobo por aferrarse a la vida…
La historia inspiradora de Lobo. ¡CONÓCELA!
Lobo al ser rescatado le fue diagnosticado con Moquillo (Esta enfermedad altamente contagiosa afecta al aparato respiratorio, al sistema digestivo y al sistema nervioso), gracias a Dios y a los cuidados recibidos, su recuperación iba progresando y fue dado en adopción a una familia, pero por su conducta fue devuelto. Por lo que sus dueños decidieron que se quedaría con él.
Su recuperación fue total, pero hace dos años se quedo ciego a consecuencia de Glaucoma en sus dos ojos (el glaucoma es una enfermedad mortal en la visión) poco a poco fue superando su crisis de haber quedado ciego, que su comportamiento era casi normal hasta que empezó a padecer problemas neurológicos con padecer síndrome vestibular.
La enfermedad vestibular en perros geriátricos a menudo es confundida con un derrame cerebral. El vértigo provocado por la enfermedad puede ser especialmente intenso en los perros mayores con síntomas de náuseas, dificultad o incapacidad para ponerse de pie, inclinación de la cabeza, nistagmo, y dar vueltas.
Fue tratado por un especialista y aparentemente todo iba bien, aunque padecía de vértigos y muchos mareos, se le hicieron varios estudios hasta que llegó el día menos esperado que les cambiaría la vida a todos.
La gran lección de lucha y amor de Lobo….
En 3 de mayo del 2018 le realizaron una limpieza de oídos a Lobo, algo rutinario que servia para verificar si tenía alguna infección, pero por su carácter tuvieron que sedarlo. A raíz de esa situación Lobo perdió la audición.
Para sus dueños fue un shock total, porque Lobo no solo ya padecía de ceguera sino que ahora se le sumaba la pérdida de audición.
Su recuperación hoy en día ha sido lenta y dolorosa, él ha utilizando su olfato como guía para orientarse y así poder disfrutar de sus aventuras, junto a sus dueños que lo aman.
A pesar de las grandes dificultades que a sufrido Lobo, ha dejado grandes enseñanzas a las personas que están en su alrededor, especialmente a sus dueños.
“El gran valor de la vida y su gran hazaña de lucha sin importar los obstáculos, pero sobre todo y el amar y respetar a los animales”.
Historia enviada por: Pablo Pereira (Papá de Lobo)
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