Cómo lidiar con el síndrome del gato gruñón


Los gatos tienen un universo aparte. Se asean el cuerpo con su propia lengua, logrando increíbles posturas que son dignas de un gimnasta profesional; escalan a través de las repisas de los libreros y dominan las alturas con apenas tres saltos ágiles; pueden pasar horas contemplando un punto indeterminado de la sala sin llegar a aburrirse.

Es cierto, son una especie fascinante. Pero también pueden ser un tanto refunfuñones.

A este comportamiento se le llama el síndrome del gato gruñón.

Una parte de su fama de ser independientes, a veces poco afectivos, incluso malhumorados se asocia a ello, aunque existe un por qué y es importante saberlo, pues entre mejor comprendas lo que sucede en el contexto de tu mascota, hay mayores probabilidades de que modifique esa actitud.

Eso significa que, si bien son mascotas inteligentes, ciertos gatos podrían estar respondiendo de una manera que los haga parecer insoportables o agresivos, ante ciertos estímulos a los que usualmente acceden con facilidad acariciarlos, por ejemplo. Claro, si un gato bufa o lanza un zarpazo a sus compañeros humanos o incluso a otros gatos, no está dando los buenos días.

Hay algo que lo estresa, que lo hace enojar y decir: no, no voy a permitir esto.

Sin embargo, es una realidad que conforme se pasa tiempo con él, algo se comprende de su lenguaje y de sus necesidades. Y muchas veces esa actitud que se parece a la de un ogro puede irse equilibrando con las interacciones.

⚠️ Lo primero que hay que reconocer es qué le genera ese estrés, si se trata de un rasgo de su temperamento o existe un conflicto en particular con las atenciones que tiene alrededor.

Por ejemplo, si le molesta el ruido o si tiene un cambio repentino de humor ante cosas tan simples como mover el arenero. Reconocer esto es vital para mejorar su estancia.

Los gatos tienen diferentes niveles de sensibilidad, y si sus compañeros humanos están enfadados, ellos lo sabrán y se estresarán.

Se trata, pues, de un trabajo en equipo. Lo ideal es generar asociaciones positivas que puedan ir acercando a la mascota a las personas. Una de las maneras que recomiendan los especialistas es consentirlo con alimento de la mejor calidad.

Un alimento Premium o Super Premiun puede ser la respuesta a esos momentos en que el gato parece agobiado.

Al generar un estímulo positivo a través de la comida, la relación con su familia humana tendrá cambios benéficos. De lo que se trata es de garantizar el bienestar de las mascotas, hacer más confortable su mundo.

Una mascota sana es una mascota feliz.

Al nutrir a tu mascota con alimentos Premium y Super Premium no requieres de ningún suplemento, ¡ya que son alimentos balanceados y completos!

Fuente: Pet Food Institute