Los gatos son mascotas excepcionales y muy especiales, no solo en su manera de hacer más alegres nuestras vidas sino en los cuidados que tenemos que tener con ellos. Muchos los consideran una versión 2.0 de los perros, pero para nada son iguales a un perro.
Son seres que conservan ese instinto cazador y enigmático que nos fascina. Sin embargo, por independientes y osados que puedan ser, igual necesitan de nuestros cuidados como tutores responsables y amorosos.
Es por ello que los planes preventivos son indispensables.
Dentro de los cuidados que debemos tener con nuestro gato se incluyen las vacunas y desparasitaciones.
En el caso de las vacunas debemos iniciarlas a las 9 semanas de vida de nuestro gatito, siendo constantes y muy cumplidos con el esquema que generalmente consiste en dos dosis de vacuna triple, dos dosis de vacuna contra leucemia viral felina y una dosis de vacuna antirrábica, en el caso específico de la vacuna antirrábica a partir de las 12 semanas de edad.
Esto con el fin de proteger a nuestro gatito en sus primeros meses de vida contra enfermedades que pueden poner en riesgo su salud y su vida.
Es muy importante que sepamos que no solo debemos vacunar a nuestro gatito cuando es un bebé, sino también en su etapa de vida adulta.
En el caso de un adulto anualmente debemos colocar una dosis de vacuna múltiple, una dosis de vacuna contra leucemia viral felina y una dosis de vacuna antirrábica, cada año de la vida de nuestro gato.
Para mantenerlo protegido siempre y de así evitar que pueda contraer enfermedades virales.
Con la vacunación estamos protegiendo a nuestro minino de enfermedades como, panleucopenia, rinotraqueitis infecciosa felina y calicivirus felino, estas tres enfermedades en el caso de la vacuna triple felina; también contra leucemia viral felina y en el caso específico de la vacuna antirrábica contra la rabia, que es una enfermedad muy peligrosa y de gran importancia para la salud pública.
La rabia es una enfermedad que se contagia por el contacto con sangre o saliva, significa que debe haber una mordedura o lesión que generalmente implica sangre de un ser susceptible con la saliva de un ser infectado para que la enfermedad pueda transmitirse.
Es muy importante recordar que la rabia es de importancia en la salud pública, por ser una enfermedad zoonótica, lo que significa que también se puede pegar a nosotros los seres humanos.
La rabia es una enfermedad que se podría decir, no tiene cura.
La desparasitación es crucial para prevenir enfermedades en gatos, incluso dentro de casa. Los gatos cazan pequeños animales que pueden estar contaminados con bacterias y parásitos, poniendo en riesgo su salud. Algunos parásitos también pueden afectar a los humanos.
No olvides asesorarte con tu médico veterinario de confianza respecto al plan de prevención de enfermedades y parásitos más conveniente para tu minino, el profesional de la salud es el más indicado para asesorarte en cuanto a la frecuencia y el tipo de productos que se adapten a la necesidad y estado de salud de cada mascota.
Tema realizado por: Por M.V. Pamela Chajón de Aldana Col. 2202, Gerente de marca Zoetis en Suplimet Guatemala